En estas fiestas su agenda se satura de reuniones familiares, compras de último momento, comidas y agasajos, festejos en la oficina o ceremonias en la escuela. Lo más probable es que con tantos eventos no logre mantener el peso.
Se sabe que esta época del año atenta contra una alimentación sana: usted está muy ocupado para continuar con su actividad física rutinaria y por otro lado, ¿quién va a contar calorías en una fiesta? La tentación de abandonar y darse por vencido es grande. Con un poco de concentración, en cambio, es posible mantenerse. Piense lo bien que se sentirá en enero si se cuida ahora. Aquí, algunas pautas.
Sea flexible
En lugar de tirar la toalla porque no puede hacer una hora de ejercicios, considere que media hora o tramos de 10 minutos cada uno son mejores que nada. Aunque breve, una sesión de ejercicios le ayudará a combatir el estrés y a dormir mejor para estar en condiciones.
Instaure una nueva costumbre familiar
Realice antes de cenar una caminata con un familiar o un amigo: puede ser una buena forma de ponerse al día y de evitar a la vez el aperitivo previo. Luego de la cena, en vez de apoltronarse frente a la TV, inaugure otra nueva tradición: una caminata familiar. Es una gran manera de relacionarse y de quemar algo de lo que se comió. Si está invitado a una casa cercana es buena idea ir caminando, así de paso hace un poco de ejercicio y evita tener que designar a un conductor para el regreso.
Camine por el centro comercial hasta bajar de peso
En esta época es casi imposible evitar ir de compras. ¿Qué tal si lo toma como una actividad física? Dese una vuelta extra alrededor del centro comercial. Estacione el auto a algunos cientos de metros de la entrada y así quemará, junto con su dinero, algunas calorías.
Planifique antes de la fiesta
Ayunar antes de una fiesta puede parecer una buena estrategia para ahorrar calorías, aunque casi seguro se le vuelva en contra. Es mejor, previamente, hacer una comida liviana con proteínas y fibras y será menos probable excederse luego.
Camine antes de servirse
Los bufés son una amenaza segura para cualquier dieta. En vez de volcar en el plato cuanto bocadillo encuentre, recorra primero la mesa, registre lo que más le apetece y luego recién tome un plato. De este modo, la elección será más inteligente. La mayoría de los bufés tienen frutas como opción de postre.
Ahorre para este momento
Si usted ya prevé que se va a permitir algún postre importante y, en definitiva, esta es una época para darse algunos gustos, evite durante los dos días previos algunos cientos de calorías. El sacrificio no producirá grandes sufrimientos y el placer no traerá culpas ni kilos extra.
Cuídese de la bebida
La gente suele olvidar que los líquidos también aportan calorías y ¡en qué medida! ¿Necesita pruebas? Una copa de ponche de huevo tiene casi 350 calorías. Si desea beber alcohol, elija bebidas con menos calorías: vino, cerveza ligera o un spritzer. Entre copa y copa, beba agua. Totalice estas calorías al final del día y tenga en cuenta que el alcohol disminuye la propia voluntad de resistir las tentaciones.
Considere la actividad física como inspiración para sus regalos
Para mantener la motivación, ¿por qué no pedir —o regalar— algún accesorio relacionado con la actividad física? Un nuevo par de antiparras, un podómetro para ayudarle a llegar a los 10.000 pasos, una soga para saltar en casa o un DVD con nuevos ejercicios son regalos, no muy caros, que pueden ayudarlo a ponerse en movimiento.
Perdónese
Lo más importante: esta es una época de alegría. Si comete deslices, no sea severo consigo mismo. Retome la senda y recuerde el sentido de hacer esto: mantenerse en forma es la mejor manera de asegurarse un feliz y saludable año nuevo.
Fuente: http://www.salud.latam.msn.com
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